La educación inicial ha cobrado relevancia en las últimas décadas. Los estudios que aseveran los impactos positivos que genera la estimulación a temprana edad, son cada vez mayores y cuentan con un gran respaldo científico. En nuestro país las matrículas van en crecimiento, pero la pandemia ha golpeado fuerte en este nivel y los efectos negativos que esto pueda tener no se observarán en el corto plazo. A través de la Fundación Educacional Oportunidad conocimos dos iniciativas de las comunas de Paredones y San Fernando, que, a pesar de la falta de recursos y conectividad, lograron mantener el vínculo y los aprendizajes durante la crisis sanitaria.
De acuerdo con los datos entregados por el Informe de Caracterización de la Educación Parvularia, las matrículas de educación inicial han ido en incremento constante, considerando los periodos desde 2012 hasta 2018. La Subsecretaria de Educación Parvularia, institución que elaboró este informe, fue creada bajo la Ley N° 20.835 en el 2015, con el fin de generar avances en la visibilización y especialización de este nivel educativo, que cada día cobra mayor relevancia en el desarrollo social, emocional e intelectual de niños y niñas.
La historia de la educación inicial en Chile data desde mediados del siglo XIX, pero no fue hasta 1999 donde se instauró en la Constitución como el primer nivel del sistema educativo del país. Su función, de acuerdo con la Ley N° 19.634 es “atender integralmente a niños y niñas desde su nacimiento hasta su ingreso a la educación básica, y cuyo propósito es favorecer de manera sistemática, oportuna y pertinente, el desarrollo integral y aprendizajes significativos en los párvulos”.
Educación inicial en pandemia
La cuarentena también impactó a los establecimientos que imparten Educación Parvularia, muchos de los cuales se adhirieron al sistema de clases online para mantener el vínculo socioemocional y educativo con los niños y niñas. Sin embargo, al igual que en la educación básica y media, la baja conectividad, la falta de recursos, sumado a la ubicación geográfica poco accesible a las señales telefónicas o de Internet, desencadenaron un escenario complejo para cumplir con los objetivos propuestos para el año 2020.
Padres Padrinos
María José Rodríguez, educadora de párvulos del Colegio San José de los Lingues, comenta que los niños y niñas que asisten a este establecimiento educacional ubicado en la VI región, viven en un sector llamado El Carmen, situado en la precordillera de la comuna de San Fernando, a 40 minutos del colegio en transporte escolar. Al tener estas características geográficas el acceso a internet es complejo, el servicio es intermitente y mucho más caro que en la ciudad, menciona María José, y las familias no poseen recursos suficientes para costearlo.
En consecuencia, esta educadora junto con la técnico Victoria Galaz, comenzó a entregar material impreso a los hogares para mantener activos a los niños y niñas de los niveles de transición 1 y 2, que forman un curso heterogéneo de 21 alumnos. “Cada dos semanas íbamos casa por casa, en un auto particular, dejando una bolsita en la entrada con todas las guías y material de trabajo. Después de 15 días hacíamos el recorrido nuevamente, pera retirar el material antiguo y proporcionar el nuevo”, explica la educadora.
Sin embargo, había familias que no tenían tiempo para sentarse a trabajar con los niños, por lo que estas profesionales pensaron en una solución: "pensamos en que otro apoderado del curso, que viviera cerca del estudiante, pudiera ir todos los días un ratito, para acompañar a los niños y niñas que necesitaban ayuda".
Esta iniciativa se potenció al crear un Whatsapp, en el cual la educadora y la técnico, enviaban videos de las actividades diarias facilitando el trabajo de estos padrinos. El ingreso a las casas siempre fue consensuado con familias, quienes al comienzo estaban un poco inseguras de aceptar esta ayuda, pero todo cambió al ver los buenos resultados. La educadora destaca que “los padres estaban felices, ya que los niños realmente aprendieron, con esto alcanzamos un 90% de participación”.
La evaluación para este nivel se planificó en conjunto, ya que hace varios años que las educadoras de la Corporación Municipal de San Fernando se reúnen y trabajan de manera colaborativa. En esta ocasión, se evaluó el trabajo realizado por los niños durante el año más una guía especial de evaluación para los padres creada por las educadoras, que buscaba obtener un catastro de lo que los padres observaron respecto del aprendizaje de sus hijos.
“Los padres estaban felices con esta iniciativa, ya que los niños realmente aprendieron, con esto alcanzamos un 90% de participación”.
Acercando hogares con la bolsita viajera
Beatriz González, Coordinadora de Educación Parvularia de Paredones, junto con educadoras y trabajadores de la educación, al observar que el confinamiento estaba impidiendo a los apoderados a asistir a las escuelas a retirar los materiales dispuestos para los niños y niñas de las escuelas y colegios de la comuna, decidieron que era momento de innovar. “En Paredones tenemos furgones escolares licitados y otros que ha dispuesto el Ministerio de Educación. Nuestra premisa fue que ningún estudiante podía quedar sin atención y coordinamos con los establecimientos que los transportistas se acercaran a las casas con las educadoras para realizar visitas y gestionar la entrega del material que cada escuela preparaba para sus niños y niñas”, señaló la autoridad en entrevista con el programa “Un Buen Comienzo”, de Fundación Educacional Oportunidad.
Esta iniciativa, que se implementó en toda la comuna, acercó la educación a los hogares de la comunidad, que debido a lo complejo del territorio que se ubica en medio de cerros y quebradas, no permitió el acceso a clases online o llamadas frecuentes.
“La Bolsita Viajera ha sido muy importante, no solo porque los viernes trae y se lleva el material que realizamos cada semana, sino porque además es una forma de que la escuela esté siempre presente. Carlitos ya sabe que en la Bolsita vienen sus tareas, la espera con ansias, y sin ella se perdería la conexión con su escuela y sus compañeros”, relató el apoderado Carlos Núñez de prekínder de la Escuela Albertina Valenzuela, en conversación con la Fundación Educacional Oportunidad.
"En esta etapa absorben todo, aprenden muy rápido, y no tener contacto permanente con la escuela y sus compañeros les ha afectado un montón”, comenta Carlos Nuñez apoderado de prekínder de la Escuela Albertina Valenzuela
Estas historias destacan el trabajo colaborativo en las comunidades, la innovación que surge desde una crisis y relevan la importancia que tiene para los niños y niñas que inician su educación el contacto y el vínculo que generan con sus escuelas, compañeros y educadoras. Comenzando el 2021, consideramos que es necesario recoger estos aprendizajes y evidenciar la labor creativa y social que desempeñan las educadoras y técnicos.