El bienestar de la comunidad trae como consecuencia una mejora en el clima escolar, los aprendizajes y la convivencia entre pares. En este ámbito se requiere una evaluación previa del contexto y la planificación de acciones concretas para fortalecer prácticas positivas que incrementen un ambiente óptimo para la labor educativa.
Junto con dar la bienvenida al segundo semestre del año lectivo, en esta ocasión queremos presentarte experiencias de colegas que, como tú, inician una nueva etapa del año escolar, en donde la salud mental, la convivencia y el bienestar de estudiantes, docentes y trabajadores de la educación siguen siendo prioritarias.
Al respecto, el Ministerio de Educación, junto con las comunidades educativas y expertos en salud mental y convivencia escolar han evidenciado necesidades y propuestas para abordar este ámbito tan relevante en la educación. Sobre este punto, la experta en convivencia escolar de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Verónica López, llama a realizar cambios duraderos y consistentes que permitan generar un espacio para el trabajo intersectorial, donde participen los diversos estamentos del establecimiento y de la sociedad. Asimismo, la educación socioemocional es un eslabón fundamental para lograr estos objetivos.
Por otra parte, la 3° Encuesta Vinculando Aprendizajes realizada por educarchile, ha evidenciado que el agotamiento por el cambio de modalidad de enseñanza y el retorno a clases presenciales, ha aumentado la exigencia en docentes, lo que se ha reflejado en el 52% de agobio que manifestaron en este sondeo.
Experiencias docentes para el segundo semestre
De acuerdo con la nueva Política para la Reactivación Educativa Integral Seamos Comunidad, un pilar para la mejora de la comunidad es la Convivencia, Bienestar y Salud Mental, la cual se presenta de manera imperiosa para avanzar hacia una educación de calidad, la que debe permanecer como una práctica arraigada en la cultura escolar.
Patricia Díaz Godoy, jefa de UTP de la escuela La Isla Emma Escobar de Lagos de Rengo, menciona algunas de las acciones que surgieron en la jornada de reflexión que tuvo lugar al cierre del primer semestre:
- ¿Cuáles son los principales desafíos que descubrieron como establecimiento en el área Convivencia, bienestar y desarrollo integral de estudiantes?
Los principales desafíos se encuentran en descubrir el real impacto de la pandemia en los estudiantes y apoderados a nivel de socialización, ya que se pensó que al volver a la presencialidad todo regresaría a la normalidad, lo que no fue así.
Para cumplir con estas necesidades se han aplicado protocolos y actualizado los que estaban vigentes, y por sobre todo nos hemos puesto como objetivo ser sistemáticos y rigurosos; realizar entrevistas con estudiantes y apoderados. Este procedimiento ha revelado que existen muchas problemáticas dentro de los hogares, las que han permeado en nuestra escuela, por ello es esencial continuar con esta labor de forma paulatina, para abordar la mayor cantidad de casos que sea posible.
- ¿Qué prácticas de cuidado y bienestar para su comunidad se han propuesto para el segundo semestre?
Hemos realizado talleres de prevención de situaciones, de autocuidado bastante dinámicas, pero consideramos que esto es momentáneo.
Además, para quienes lo necesiten, tenemos planificado talleres de Heartfulness, que consiste en una técnica de meditación que propone seguir el corazón, conectarse con el yo interior y así develar lo mejor de nosotros mismos y de lo que nos rodea. Esta actividad se realizará con el objetivo de proporcionar ayuda en el área emocional y espiritual.
Desde Río Bueno, Yessica Barrientos Vera, encargada de convivencia escolar y docente de aula en la Escuela Rural Vivanco, plantea que el establecimiento se ha enfocado en continuar trabajando en conjunto con el psicólogo y la encargada de convivencia escolar en talleres, charlas, conversatorios, actividades recreativas y socioemocionales con toda la unidad educativa.
“También, hemos planificado organizar la escuela para padres y apoderados con entes externos como Senda, Carabineros, salud y Junta de Vecinos, con el fin de involucrar a la comunidad. Además, realizamos seguimiento de acciones planificadas en el plan de convivencia por dupla y encargada de convivencia, para potenciar el trabajo socioemocional, para el bienestar de todas y todos”.
Por otra parte, Camila Opazo Meza, profesora de Inglés en el Instituto Cristiano Luis Gandarillas de la comuna de Maipú, nos comparte parte de la reflexión que su establecimiento contempló para continuar aplicando durante el segundo semestre:
- ¿Cuáles han sido las conclusiones respecto al área Convivencia, bienestar y desarrollo integral de estudiantes?
Como cuerpo docente, llegamos a la conclusión de que el principal desafío en el área convivencia, bienestar y desarrollo integral de las y los estudiantes es prepararnos y capacitarnos para la contención emocional de estos, ya que hemos visto que se han incrementado los episodios de angustia en los estudiantes durante este año presencial.
- ¿Qué prácticas de cuidado y bienestar para su comunidad se han propuesto para el segundo semestre?
Los equipos tienen agendada una serie de charlas y talleres de orientación para estudiantes y apoderados, en las áreas de afectividad, sexualidad y sana convivencia escolar, dictadas por la orientadora de nuestro establecimiento y el encargado de convivencia escolar.
Sin duda, el bienestar de la comunidad escolar completa es una esfera amplia y en la cual queda mucho trabajo por realizar.
¿Y en tu establecimiento, qué acciones están realizando para desarrollar el eje de Convivencia, bienestar y desarrollo integral? ¡Comenta en nuestras tus experiencias en redes sociales, todas las ideas son valiosas!
Además, te recomendamos el webinar realizado junto a la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, sobre salud mental y bienestar docente.