Cuando hay una buena gestión interna en la escuela, las y los docentes son más felices. Ese fue uno de los hallazgos presentados en el estudio de carácter cuantitativo, representativo a nivel nacional, que consideró la realización de una encuesta en línea basada en la metodología de Happiness at Works a 1.200 profesores de aula de todo Chile, con el objetivo de caracterizar el grado de felicidad o “satisfacción subjetiva” de los profesores chilenos en sus establecimientos, e identificar los factores asociados a ella.
El estudio, realizado por Elige Educar y Japiworks, revela que los profesores en Chile manifiestan en general ser felices en su trabajo, sin embargo, esta felicidad se ve limitada por factores como el alto estrés, las bajas oportunidades de progreso profesional y las condiciones laborales.
“La evidencia muestra que profesores satisfechos y agradados en su comunidad escolar no sólo permanecen más tiempo en nuestro sistema escolar, sino que son capaces de entregar más y mejores oportunidades de aprendizaje a todos sus estudiantes, impulsando experiencias significativas en el aula, generando una colaboración provechosa con sus colegas”, explica María Jesús Sánchez, directora del área de Investigación de Elige Educar. “Es decir, el grado de bienestar y felicidad que promovamos en nuestras escuelas incidirá directamente en la calidad de nuestra educación. Esta es una razón muy potente para avanzar en promover la felicidad docente”.
Avances y desafíos
En cuanto a los avances, el estudio mostró una alta motivación de los profesores por la enseñanza y el reconocimiento del valor social de su trabajo. En concreto, 6 de cada 10 docentes indicó estar feliz en su trabajo, y 9 de cada 10 dijo creer que su profesión genera beneficios tanto para sus estudiantes y familias como para la sociedad. Por otro lado, el estudio arrojó que los educadores de párvulo son los docentes más satisfechos en sus trabajos dentro de los distintos niveles educativos. Y a nivel de dependencia, la Educación Pública concentra la mayor cantidad de docentes que manifiestan un alto nivel de compromiso y motivación.
En cuanto a los desafíos, existe una visión poco positiva de los profesores sobre sus posibilidades de progreso de carrera. En concreto, sólo un 31% de los profesores evaluó positivamente sus oportunidades de progreso de carrera en su trabajo actual, estando 14 puntos porcentuales por debajo de otros profesionales. “Cabe señalar que estos datos fueron recogidos antes de que se comenzaran a implementar los cambios de la Ley de Carrera Docente, que justamente apuntan a avanzar en este aspecto. De desarrollarse una buena implementación, debieran percibirse asociados a este tema en el mediano plazo”, explica Sánchez.
Junto con ello, el estudio también mostró que los profesores perciben poca capacidad de influencia en las decisiones de sus establecimientos. Sólo 3 de cada 10 profesores evaluó positivamente sus posibilidades para plantear críticas constructivas sin temor a represalias, y dijo creer que puede influenciar las decisiones que afectan su trabajo (cifra mucho menor al resto de los profesionales de Chile que son 5 de cada 10). Asimismo, la mitad de los docentes reportó altos niveles de estrés, independiente de la dependencia administrativa, años de experiencia profesional, nivel de enseñanza que imparten y sexo.
Claves entre los docentes más felices
Al comparar la percepción de sus establecimientos entre los docentes que se reportaron más y menos felices, el estudio arrojó que la gestión educacional marca una diferencia importante. Así, quienes manifiestan mayores grados de felicidad en sus establecimientos pusieron, en promedio, notas de 1 a 7 más altas en aspectos como el equilibrio entre el tiempo personal y laboral, la percepción de menos momentos de frustración en el trabajo, de mayores oportunidades para progresar en sus carreras, el recibir feedback constructivo por parte de sus superiores, la percepción de mayores espacios para plantear críticas sobre el trabajo pedagógico y la sensación de tener una mayor capacidad de influir en decisiones relevantes para su quehacer.
